Ya tenemos por un lado el cuerpo y por el otro el mástil. Para unirlos hay varias formas de hacerlo. La más corriente es mediante cuatro tornillos puestos por la parte trasera pero para ello hay que dejar un mínimo de 15 mm de espesor en la base del hueco del cuerpo donde va a ir alojado en mástil. La Red Special sólo tiene 5 mm de espesor pero son suficientes si en vez de atornillar la unión se hace encolando ambas piezas (cuerpo con mástil). Encolando se consigue que la fuerza de sujeción se reparta entre el fondo, tres caras y una pequeña parte de la tapa delantera ya que el mástil queda 10 mm empotrado dentro del cuerpo.
Primero se comprueba que la terminación del mástil encaja perfectamente en el hueco del cuerpo. Si no es así hay que limar un poco de donde sobre. Interesa que haya un poco de holgura pero poco. Si el mástil entra caso a presión, a la hora de encolar y meterlo el pegamento de las caras se quedará fuera y no habrá capa de cola entre las paredes de madera. Demasiada holgura provocará que queden huecos que más tarde se verán.
Una vez que está todo bien preparado, tan sólo queda encolar y juntar ambas piezas. Mientras se seca la cola, ambas piezas han de estar bien sujetas a algo fijo (una mesa, por ejemplo). Para alinear el mástil con respecto al cuerpo se puede hacer de dos maneras. Una es poner sobre la mesa los planos y sobre los planos la guitarra y el mástil y alinearlos. Otra forma es lanzar una línea con un hilo fino desde el clavo que pusimos donde va la sujeción del cincho hasta el punto medio de la pala (dentro de su recta de simetría). Hay que encolar el mástil y el cuerpo de tal forma que el hilo pase por el eje de simetría del mástil y del cuerpo. Con esta línea también se controla en ángulo que hay entre el mástil y la cara de la guitarra. En mi guitarra ambos están en un plano pero lo normal suele ser que estén a unos 4º. Yo empleé simultáneamente ambos procedimientos, el del hilo y el del plano. Una vez que el cuerpo y el mástil están el línea, se sujetan ambos a la mesa con unos sargentos y se deja un par de días para que el pegamento se seque. Una vez que el pegamento haya secado, puede ser que en los cantos queden restos de pegamento que ha sobresalido. Simplemente se quitan con un formón o un cúter.
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