Siracusa Custom Guitar

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Alguna vez escuchamos decir que nuestro país está repleto de música y de músicos. Pues bien, también tiene excelentes artesanos en lo que a la construcción de instrumentos eléctricos se refiere. Maximiliano Siracusa es un luthier de Bahía Blanca, que realiza trabajos de reparación y contrucción de guitarras y bajos eléctricos. La última vez que lo encontramos fue en la edición 2010 de la Muestra de Música de la ciudad de La Plata. Allí, él nos comentó sobre un bajo que le había fabricado a Willy Quiroga, bajista y líder de Vox Dei, quien habló orgullosamente del mismo, en la nota que esta revista le realizara en su edición Nº 2.
La guitarra que Siracusa nos envió para este reporte también había estado expuesta en aquella muestra, y es la que a continuación pasamos a describir.

“La guitarra la construí con las características que el cliente me pidió”, nos explica el luthier. “Tiene el formato de la EVH de Van Halen, y el grosor del mástil está inspirado en una Strato Yngwie Malmsteen de los ’90.” El cuerpo de esta guitarra es de una madera llamada cancharana, y es de una sola pieza. Lleva una tapa de roble moteado, con un tinte verde que deja ver las vetas de la madera. Entre medio se encuentra una gruesa línea de madera, que hace las veces de cenefa, bordeando todo el cuerpo. Todo el instrumento lleva pintura al poliuretano.
El mástil es de hard maple, fabricado en tres piezas iguales, pegadas a lo largo. “Aquí, lo que se buscó fue la rigidez que dan las tres piezas de maple, junto con la trastera del mismo material”, nos detalla Siracusa. “Esto lo hice así, para que no se desetabilizase al usar la palanca. El mástil está teñido con un tinte amarillo, para darle una continuidad al verde de la tapa.” El mango viene asegurado al cuerpo mediante cuatro tornillos, sin mediar chapón alguno. En cuanto a su harware, esta guitarra trae dos doble bobina DS Pickups Expression fijados directamente sobre el cuerpo del instrumento, un pote de volumen y uno de tono, una llave selectora de tres posiciones, y un sistema de vibrato Schaller con morsa trabacuerdas. El sistema, al igual que en la EVH original, no es flotante sino que solamente baja la afinación.

“Este trabajo me llevó unos tres meses, y lo que hice, a diferencia del modelo original, fue mover la localización de la llave selectora, poniéndola entre la palanca y los potes, como vienen por ejemplo en las PRS.”
Ni bien la tomamos, notamos por una lado su peso, resultante de la densidad de la madera del cuerpo, y por el otro la comodidad de su diapasón. También, el balance del instrumento es casi perfecto, ya que no se inclina ni para un lado ni para el otro. Esto es como para tener en cuenta, tanto si tocamos de sentado como de parado. Volviendo al tema del diapasón, las cuerdas están bien pegaditas, permitiendo fraseos veloces con legatos y distintas técnicas de hammer-on y pull-off.
En cuanto a sus sonidos, este instrumento tiene mucho cuerpo, cosa muy notoria en los seteos limpios con el mic del mango. En los registros distorsionados, esta guitarra… pide rock, transformándose así en un instrumento dúctil para varios estilos.

Si bien se dice que Dios está en todas partes, pero que atiende en Buenos Aires, creo que en este caso, a los luthiers como Siracusa, este asunto no parece importarle demasiado. Lo que tenemos entre nuestras manos es un instrumento de nivel profesional, con una cuidada terminación, y fabricado con materiales nobles de primera calidad. “Realmente estoy maravillado con este bajo, al cual le pusieron de nombre Estigma. Apenas lo ví me encantó, no sabés cómo suena”, decía Willy Quiroga de su instrumento. E imaginamos que el dueño de esta guitarra, seguramente que piensa lo mismo.

M. Roascio